El Lapiz

Para utilizar el particular lapiz consta de dos pasos.
Primeramente hay que levantar el lapiz con plena delicadesa poniendo los tres dedos mas chicos de la mano en la parte inferior del lapiz y los otros dos restante crusandolos sobre la parte superior del este mismo.
Luego con la mayor delicadesa pocible, que muy pocos practicantes logran, este famoso lapiz es giado hacia la lineas superiores de la hoja y con la mayor seguridad en ellos mismos empiesa a mancharlas con extraños codigos dejandose llevar por las ideas de su perturbada mente moviendolo con plena confiaza y sin temor a lo que se va a traducir.
Despues de esta estapa, la mas sacrificada ya que el haber escrito tantos codigos y haberse ido matando lenta y dolorosamente lo deves soltar tranquilamente dejandolo en su altar donde descanza en forma diagonal en su gran trono del escritorio, el lapizero.


Constanza Ruz